Cómo cuidar correctamente la piel de tu bebé

El principal problema de la mayoría de los padres primerizos es adecuarse al cuidado diario del bebé, cómo mantenerlos sanos y sin ningún riesgo de malestares o enfermedades, y es que claro, es el principal objetivo de todos, garantizar la salud de los nuestros hijos en cualquier escenario posible. Si quieres lograr este cometido, es importante aplicar ciertos parámetros en la vida diaria de nuestro niño, todos ellos recomendados según las opiniones de profesionales.

A continuación, enumeramos una a una las reglas que debes seguir para saber cómo cuidar correctamente la piel de tu bebé.

Evita cualquier producto alcalino

Puede resultar más que obvio, pero debes tener en cuenta, la piel de los pequeños no tiene la misma flora bacteriana que la nuestra, en consecuencia, no está tan protegida contra agentes externos. Por ejemplo, el pH de la piel de los bebés, comúnmente varía entre un 4.5 a 6, lo cual disminuye su eficacia al formar la barrera que resista el contacto con algún agente infeccioso. También sucede que la inmadurez de las glándulas sebáceas y el poco desarrollado del sistema inmune de tu pequeño le hagan un foco muy sensible a multitud de infecciones.

Entre los productos de este tipo que debes evitar se encuentran los jabones comunes, que casi siempre cuentan con un pH mayor a 7, y perjudican en gran medida al bebé pues modifica el pH propio de su piel llegando incluso a irritarla. En lugar de estos puedes optar por emplear un champú de cuerpo completo, con el que podrás mantener el pH del niño y a su vez prevendrán que aparezca la costra láctea en el cuero cabelludo, protegiéndolo de infecciones o lesiones por absorción.

Manten una hidratación constante

Para evitar alteraciones en la acidez de la piel, es importante que mantengas hidratado toda la piel de tu bebé a lo largo de su desarrollo, pues la resequedad trae como consecuencia la pérdida del contenido hídrico y lipídico natural, que puede derivar en una posible enfermedad de la piel conocida como dermatitis atópica.

Es importante que emplees cremas hidratantes restauradoras, pues son las que más ayudan a generar las capas de protección indispensables para evitar enfermedades en la piel del bebé.

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Vigila la dermatitis atópica

Lo más importante para evitar el padecimiento de esta enfermedad es tratarla en el momento adecuado. Pues el padecimiento crónico exacerba periódicamente la piel y puede volverse un verdadero problema si no se emplean los productos correctos para su tratamiento. Para poder diagnosticarla a tiempo debes de considerar que el principal síntoma de este padecimiento es una picazón y enrojecimiento en algunas zonas del cuerpo, y provocan continuamente una gran incomodidad en el día a día de nuestro pequeño.

Te recomendamos que en caso de que tu bebé llegue a presentar algún síntoma de esta enfermedad te dirijas al doctor de forma inmediata para que diagnostique y trate de la manera correcta a tu pequeño.

Utiliza un protector solar

Es muy importante que si vemos signos de que nuestro pequeño tenga la piel delicada, les protejamos del principal causante de afecciones sobre este tejido, el sol. Los protectores solares son los más recomendables para darles esa barrera que evitará que le resulten dañinos los rayos del sol.

Sin embargo, no hay que olvidar, no es cosa de evitar el contacto del bebé con el sol, se trata de no exponerlo directamente. Debe recibir ciertas vitaminas de este medio natural, pero es importante hacerlo de una forma inteligente, y claro, seguir al pie de la letra las recomendaciones del pediatra.

Evita baños demasiado largos

Aunque hay muchos casos donde los niños aman la hora del baño y disfrutan interactuando con el agua al momento de asearlos. Debes asegurarte de no bañarlo durante mucho tiempo, y es que se trata de saber administrarlo, el agua efectivamente no le hará ningún daño si está lo suficiente limpia para bañarle, pero sí puede afectarle si se alarga por más de 15 a 30 minutos, pues llega a deshidratar la piel.

Tal y como ya hemos comentado, los jabones comunes resultan bastante perjudiciales respecto a la piel de nuestros pequeños, hay muchos problemas devenidos de ellos y pues lo mejor para prevenir estos problemas es no usarlos, o en su defecto limitar el tiempo en que el niño estará en contacto con este tipo de elementos.

Es por esto que muchos pediatras recomiendan tener cierta cautela y estar al pendiente de todo aquello que refiere a la correcta hidratación y limpieza de todo su cuerpo. Para ello puedes utilizar un bálsamo calmante para masajear después de cada baño, especialmente en las zonas donde pueda presentar un mayor roce y un posible riesgo de descarnación por resequedad.

Vigila los síntomas de tu bebé

No hay lugar a duda que lo más importante en el cuidado diario de nuestros pequeños es poder detectar oportunamente los síntomas y tratarlos correctamente en el momento indicado. La forma más simple es realizar una pequeña inspección cada vez que realices la rutina de cuidado de tu bebé, es muy importante que sepas que eres tú quien debe velar por su salud y un desarrollo sin problemas, para que crezca de una forma sana y correcta.

Es muy importante que no solo revises en busca de alguna irritación en la piel, sino que también debes estar al pendiente de cualquier posible indicio de problemas respiratorios u otra enfermedad que pueda presentarse en tu pequeño.

Sin duda, todo depende de cómo y cuánto cuides de tu pequeño. Pero eso sí, nunca dudes en contactar con un experto en caso de que te topes con algún síntoma que no te sea posible tratar con los conocimientos comunes. Siempre es mejor tener la opinión de un profesional médico para poder actuar correctamente frente a cualquier enfermedad o dolencia que tenga nuestro bebé.

¿Preparado para cuidar correctamente la piel de tu bebé?